El Pósito
Fundación del Pósito de Recas 19 de Noviembre de 1928
ANTECEDENTES: La palabra Pósito, cuyo significado es depósito, era una antigua institución medieval que se revigorizó en el siglo XVIII, reinando Fernando VI, cuya misión era servir de almacenamiento de grano (sobre todo trigo) en años de buena cosecha, para permitir a los campesinos el sustento y la siembra en épocas malas, mediante préstamos entre el 3 y el 4,16 %. Junto al depósito material de grano pronto se incremento sus funciones con la de capitalizar y prestaciones en metálico.
A finales de ese siglo las reservas estaban sobre los ocho millones de fanegas de trigo y 45 millones de reales en Castilla, que era la zona donde predominaron. En el siglo XIX los pósitos decayeron y a principios del siglo XX se intenta rescatar su función social de ayudas al campesinado, especialmente cuando las instituciones de crédito van creciendo en dinamismo e importancia pero no precisamente en su preocupación por la agricultura.
Así surge el Real Decreto de 27 de Enero de 1927 y el Reglamento que lo desarrolla de 25 de Agosto de 1928 para dar cauce a las nuevas modalidades del crédito agrícola y funciones agrosociales. Dice el citado Reglamento que los pósitos pueden ser municipales, comarcales o fundacionales, regula su funcionamiento y junta de gobierno, ordena que todo su capital esté en metálico para destinar a préstamos agrícolas, fija las condiciones de los préstamos y beneficiarios, plazos de devolución, interés del 5 %, contabilidad, documentación, etc.
PÓSITO DE RECAS: Acogiéndose a este instrumento legal D. César Cabañas Caballero presentó una solicitud para fundar un pósito en Recas ( De tipo fundacional según el Real Decreto) cuyo motivo era contribuir hasta donde les sea posible al mayor bienestar de los agricultores de su pueblo natal y especialmente de los que por falta de medios económicos no podían aumentar la producción y mejorar su condición social.
Presenta las siguientes condiciones:
1ª El nombre será Fundación del Dr. Cabañas.
2ª El capital inicial será de 30.000 Pts. que aportará el solicitante.
3ª Funcionará con arreglo al Reglamento antes citado.
4ª Será administrado por una Junta constituida por vocales – concejales del Ayuntamiento y además por cargos:
– Vitalicios: 2 presidentes honorarios que lo fueron sus hermanos D. Fco. Javier y D. Ángel Cabañas Caballero, un vocal tesorero (su primo D. Manuel Cabañas), un vocal (el antiguo médico de Recas, D. Teodomiro López).
– Electivos: 2 vocales obreros del campo, 2 vocales hortelanos, 2 vocales labradores, 1 vocal agricultor de entre los mayores contribuyentes de Recas.
– Natos: el más próximo pariente de D. César, vecino del pueblo, los médicos que ejerzan su profesión en Recas y el presidente de la Junta de Labradores.
Todos ellos debían saber leer y escribir.
5ª Todo el capital inicial y lo que aumentara con donaciones será empleado en préstamos a beneficio exclusivo de obreros del campo, horticultores y labradores de Recas.
Las solicitudes tendrán la siguiente preferencia:
a) Obreros del campo dueños a lo sumo de su casa.
b) Obreros del campo dueños a lo sumo de una casa y media fanega de riego y 5 de secano.
c) Obreros que con sus hijos cultiven 2 fanegas de riego o 20 de secano, siendo la tierra mayoritariamente de propiedad ajena.
6ª Los repartos se efectuarían el 2 de Diciembre por Santa Elisa (aniversario de su mujer) y el 10 de Julio por San Amalio (aniversario de su padre).
7ª Los préstamos se concederán por 1 año prorrogable.
8ª Los fondos sobrantes de cada reparto se depositarán en cuenta corriente a nombre del Pósito en la entidad que ofreciera mayor interés.
9ª De los intereses del año anterior se apartarán 200 Pts. como premio a la mujer de Recas que tenga más hijos vivos, si hay igualdad a quien tenga más hembras y si persiste la misma a la madre de mayor edad. Este premio será el 26 de Julio por Santa Ana (aniversario de su madre). Si el capital lo permite podrá haber tantos premios de 200 Pts. como veces el capital contenga 30.000 Pts.
Con fecha de 4 de Octubre de 1928 se autorizó por el estado la fundación de este pósito, subvencionándolo además con la cantidad de 10.000 Pts.
EL PÓSITO TRAS D. CÉSAR. Murió en 1930, pero habrá previsto en su testamento una cláusulas referentes al Pósito. Así dice lo siguiente de sus bienes:
Serán usufructuarios sus hermanos D. Fco. Javier y D. Ángel Cabañas, donando cada uno al Pósito 5.000 Pts. cada 2 de Diciembre todo el tiempo que el disfrute dure. Cuando sea uno sólo donará al Pósito 10.000 Pts. Cuando sus sobrinos: Ascensión, Ana, Amalia y César adquieran la plena propiedad y disfrute de sus bienes cada uno dará 2.500 Pts. el 2 de Diciembre hasta que el Pósito alcance el capital de 130.000 Pts. Si su herencia fuera renunciada en todo o en parte este capital se sumaría al Pósito (Testamento de 27/12/1930).
EL PÓSITO HOY
Esta fundación ha venido desempeñando a lo largo de estos años esta eficaz labor social entre los requeños, permitiéndoles salir de algún apuro y poder seguir sacando fruto a la tierra.
Una vez cumplidas las cláusulas testamentarias de D. César el Ayuntamiento contribuyó también durante un cierto tiempo a mantener el Pósito aportando el 1% de su Presupuesto, hasta la actualidad en que con un capital de 2,5 millones de Pts. se financia exclusivamente don los intereses que produce.
Hoy en la economía actual quizá pueda parecer irrelevante pero a lo largo de estos años el Pósito ha contribuido al progreso social de Recas.
Bibliografía: Luis Miguel Bravo Bravo (1998), Archivo del Ayuntamiento de Recas.
El periódico La Nación del 20 de Noviembre de 1928, refleja en sus páginas la importancia de la noticia.
En la provincia de Toledo, y a pocos kilómetros de la capital, existe un pueblo de reducido contorno, cuyos habitantes, de rostro curtido y bronceado, hombres fuertes, robustos, vigorosos, hombres de campo, se dedican con la mayor intensidad al cultivo de las tierras que rodean en gran extensión el pueblo.
Un propietario de aquel pueblo, ilustre médico, que durante muchos años ha ejercido su carrera en Madrid, y que hoy, retirado de su profesión, pues sin duda su cuerpo pide descanso después de tantos años de incesantes trabajos, vive en Recas, su pueblo natal; el Sr. D. Cabañas Caballero, tipo de rico labriego castellano, o más bien de ganadero de reses bravas, pues tal carácter le dan sus canosas patillas y su sombrero de ancha ala, ha tenido para con sus paisanos un rasgo noble, que merece la atención de todos y el servir de ejemplo a tantas personas que en bien de la agricultura, y sobre todo de sus semejantes, se encuentran en situación igual o parecida a la del benemérito patricio Sr. Cabañas.
Este señor ha fundado en dicho pueblo un Pósito de 30.000 Pts., que será empleado exclusivamente en préstamos a beneficio de los obreros del campo, horticultores y labradores que sean naturales y vecinos de Recas, y el Gobierno, siempre atento a las buenas obras a favor de los humildes acordó subvencionar el nuevo Pósito de Recas con la cantidad de 10.000 Pts.
En el día de ayer tuvo lugar la constitución del Pósito en el salón de sesiones del Ayuntamiento del citado pueblo toledano.
Para asistir al acto fueron desde Madrid el ministro de Trabajo y Previsión, Señor Aunós; el jefe de la Secretaría auxiliar, Don Esteban Gómez Gil; el Director General de Acción Social, D. Luis Benjumea, y los altos jefes del Ministerio, Sres. Garrido, Galliay, Luengo, Del Negro, Rubio Coloma, Armada y Undabeytia.
A la entrada del pueblo fueron recibidos por el Gobernador Civil de Toledo, D. Antonio Almagro; presidente de la Diputación Provincial, D. Leopoldo Díaz del Río, presidente del Comité Provincial de Unión Patriótica, Conde de Casa Fuente; delegado gubernativo D. Tomás Luque; alcalde de Recas, D. Antonio Zurita, y D. César Cabañas Caballero.
El Vecindario del pueblo aclamó y aplaudió con entusiasmo a las citadas personalidades, que seguidamente se trasladaron a la Casa del Ayuntamiento para constituir el Pósito de Recas.
El jefe de la Sección de Pósitos, Señor Del Negro, leyó el historial de la fundación del Pósito de Recas.
El alcalde de Recas saludó al Ministro de Trabajo, y en nombre de su pueblo le dio las gracias por su asistencia al acto. Terminó con vivas a España, al Rey, al General Primo de Rivera y al Ministro de Trabajo, que fueron contestados por todo el pueblo, que se apiñaba en el salón y en la plaza del pueblo.
El jefe local de Unión Patriótica y Cabo del Somatén, Sr. Carrasco, dio lectura a unas cuartillas admirables, en las que dedicaba frases cariñosísimas y elogiosas para la persona del ilustre filántropo Sr. Cabañas.
Habló luego de los diferentes medios altruistas que pueden ponerse en práctica a favor de las clases humildes y de la extraordinaria labor del Gobierno, que no puede ser más beneficiosa para los agricultores españoles, y dice que los verdaderos patriotas, los españoles honrados, aplaudirán siempre el Gobierno actual.
A continuación se levantó D. César Cabañas, que fu objeto de una prolongada ovación.
Emocionadísimo dijo que se hallaba muy satisfecho por los buenos padrinos que ha tenido el Pósito, que él quiso crear modestamente y sin querer dar al acto la solemnidad que ha tenido.
Elogia a los labradores de Recas, que puede decirse son los mejores de la provincia, y también a los funcionarios del Ministerio de Trabajo, que desde el primer momento le dieron toda clase de facilidades para llevar a cabo su propósito, y terminar agradeciendo a todos su asistencia a aquel acto. El nuevo gobernador de la provincia, Señor Almagro, se levantó para darse a conocer y ofrecerse a todos los toledanos para cuantos asuntos y conflictos se les presenten, haciéndoles saber que tendrá mucho gusto en servirles.
Al levantarse el Sr. Aunós escucha una estruendosa ovación, que dura largo rato.
Comienza felicitando al pueblo de Recas porque cuenta entre sus habitantes con hombres como el Sr. Cabañas, modelo de persona buena y caritativa, recomendando a los vecinos del pueblo que pongan todo su interés y entusiasmo por que el Pósito de Recas sea el más importante de España.
Añade que cuando el Sr. Cabañas ha hecho esto por sus paisanos es porque éstos lo merecen y los cree dignos de tener su Pósito, haciendo con esto que disminuya la usura, verdadera enemiga del agricultor, pues nadie dudad de que en épocas malas para el labrador, como es la sementera, éste tiene que ponerse en manos de usureros, que abusan de su capital.
Luego dedica largos y elocuentísimos párrafos a la cuestión de la paz social, a la que él y el Gobierno dedican especial atención y termina dando la enhorabuena a todos, especialmente al Sr. Cabañas, y declarando constituido el Pósito de Recas.
El Sr. Aunós fue ovacionado y aclamado por el pueblo al final de su brillante discurso.
Por último, el Sr. Benjumea entregó en nombre del Gobierno, las 10.000 Pts. Con que subvenciona el Pósito.
Terminado el acto se sirvió en el mismo Ayuntamiento un “lunch”.
A las dos de la tarde, el Sr. Cabañas obsequió en su domicilio con un almuerzo a todas las personalidades que habían asistido al acto, y después de la comida regresaron a la corte, siendo despedidos con el mismo entusiasmo que a la llegada.
Felicitamos al Sr. Cabañas por su filantrópica obra, que debía servir de ejemplo para las personas que se encuentren en igual o parecida situación que aquel.